El Bautismo del Señor
Se abrió el cielo y resonó la voz del Padre, que decía: “Este es mi Hijo amado; escúchenlo”
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La fiesta del Bautismo del Señor corona el tiempo de la Navidad e inaugura el tiempo Ordinario.
La fiesta del Bautismo de Jesús es también la fiesta de nuestro propio bautismo y lo recordamos con la aspersión del agua bendita, acto que nos recuerda el agua bautismal que nos purificó de todo pecado y nos hizo hijos de Dios.
La misión de Juan el bautista fue preparar el camino del Mesías, que buscaba despertar la conciencia de la necesidad de conversión. Tal decisión de cambio se expresaba por medio de un rito bautismal: sumergirse en un elemento vital, como lo es el agua, era símbolo de purificación en tanto que salir del agua es como quien nace a una vida nueva.